Las acciones del Gobierno español deben ser la puesta a punto del gran motor de explosión de la economía española para converger con Europa. Así lo concretó el presidente de CEDE, Isidro Fainé, en su presentación del invitado del Desayuno de Trabajo CEDE del pasado 18 de abril, el Director de la Oficina Económica del Presidente, David Taguas. En el repaso que hizo Taguas a la situación actual de la economía en España, destacó la ampliación del déficit por cuenta corriente, algo que debe corregirse con el ahorro de empresas y familias, además del sector público.
Ese ahorro servirá también para que haya mayor inversión directa, menos volátil que la entrada de capitales en cartera, un patrón que actualmente es más dominante. Otros motivos del déficit están en la dependencia energética y en el deterioro de la competitividad. De todos modos, el mantenimiento del ahorro de la economía española ha sido posible gracias a la consolidación fiscal. Taguas afirmó que es muy satisfactorio el que ahora el equilibrio se base en una regla a lo largo del ciclo económico, en lugar de actuar para conseguirlo al final de cada año. Los datos indican que la deuda pública ha caído nueve puntos del PIB en tres años, por debajo del 40%. Los superávit han ido creciendo hasta el 1,8% en 2006.
En el mismo apartado fiscal, David Taguas resaltó que la reforma del sistema en 2007 quiere que ése sea más eficiente, más equitativo y más sencillo y transparente, con menos tramos y tratamientos diferenciados. Los retos siguen estando en adaptarse a la competitividad internacional, en dotarlos de un carácter medioambiental, con pagos para los que contaminan y, como ocurre en algunas comunidades autónomas, reformar el sistema de financiación autonómica.
Corregir la productividad
En el ámbito de la productividad, el mal comportamiento en España, dijo Taguas, se corrige gracias al equilibrio de la tasa de empleo, la cual ha superado ya el promedio europeo. Actualmente está en el 8,5%, el mínimo desde 1979, además de caer hasta la mitad los datos del paro de larga duración. Ello se incluye en los objetivos del Programa Nacional de Reformas 2005-2010, basado en siete ejes: estabilidad macroeconómica, estrategia en infraestructuras y agua, mejorar el capital humano, I+D+i, competitividad y eficiencia de las administraciones públicas, mercado de trabajo y diálogo social y, finalmente, fomento empresarial.
Otro aspecto destacable según Taguas es el sistema de pensiones públicas. Además de los conocidos datos de crecimiento en la Seguridad Social, la cual registrará superávit por noveno año consecutivo, los acuerdos dentro del diálogo social quieren reforzar la eficiencia y equidad del sistema. Se han aprobado modificaciones relevantes para intentar cumplir la edad de la jubilación a los 65 años. En este sentido, Taguas resaltó la necesidad de evaluar los efectos de las reformas en Alemania, Francia e Italia, entre otros, para prevenir la financiación a largo plazo que implicarán los futuros flujos demográficos.
En cuanto a la competencia, el director de la Oficina Económica del Presidente incidió en que España es uno de los países europeos con más regulación. El Gobierno lleva a cabo medidas transversales para corregir y aumentar la competencia, algo que encaja con los objetivos del Consejo Europeo para la primavera de 2007: competitividad, sostenibilidad y suministro energético.
Precisamente, el apartado energético incluye medidas acordes también con Europa. Estas suponen, entre otras, un aumento de la cobertura de energías primarias y eléctricas, una apuesta por las energías renovables y un menor riesgo a partir del acercamiento a Argelia y Marruecos como países productores y de tránsito del gas.
Un elemento en el que puso acento David Taguas fue en el de la educación. Concretamente, la Ley Orgánica de universidades quiere corregir las elevadas tasas de abandono y el alto número de años promedio para titularse en las universidades. Actualmente está demostrado que cada año de escolarización supone un 10% de aumento del salario real. En esta situación, las diferencias en años de escolarización con la Unión Europea (UE) indican que los salarios en España serían un 20% inferiores que en Europa.
Sobre infraestructuras, el Plan Estratégico de Infraestructuras y Transportes (PEIT) y el programa A.G.U.A. permitirán al país converger en capital público en 2020 con los países más ricos de la UE.