“La política de alianzas de Mutua ha sido el principal motor de nuestro crecimiento y diversificación”
Para Ignacio Garralda, ante una etapa de incertidumbre en una empresa, hay que actuar con el objetivo de garantizar la sostenibilidad de la compañía. “Creo que este es el primer objetivo que deben tener las personas que lideren cualquier proyecto empresarial y el que debe inspirar todas sus decisiones, independientemente del momento en el que se encuentren la economía y los mercados”, ha manifestado.
En los últimos 15 años, Mutua Madrileña ha llevado a cabo una importante transformación que ha impulsado a la compañía a reforzar su atención a sus asegurados, donde reside su principal valor diferencial respecto al resto del mercado, y a emprender un gran proceso de diversificación tanto geográfico como de negocios, que incluye importantes operaciones de crecimiento inorgánico. “Hemos cerrado operaciones de calado como la compra del 50% de SegurCaixa Adeslas a CaixaBank o la alianza estratégica que firmamos el año pasado con El Corte Inglés para integrar en nuestro grupo empresarial sus dos sociedades de seguros”, ha explicado.
En este sentido, el presidente de Mutua Madrileña ha señalado que “la política de alianzas de Mutua ha sido el principal motor de nuestro crecimiento y diversificación”. “Todo ello ha hecho posible que Grupo Mutua se haya convertido en la compañía líder del mercado en seguros generales y en salud, a través de Adeslas, y en una gran empresa con un crecimiento rentable y sostenido. Desde 2008 hemos multiplicado por cuatro nuestros ingresos y hoy nuestra ratio de fidelidad en autos es de las más altas del sector, del 92%, lo que supera en 12 puntos la media del mercado”, ha añadido.
Apuesta tecnológica
Para Ignacio Garralda, todos los avances logrados han sido posibles gracias al proceso de transformación tecnológica que ha situado a Mutua a la cabeza del sector, y al cambio de cultura corporativa que ha incentivado la innovación permanente, la colaboración y el trabajo transversal como un elemento más de la identidad de la compañía. La fuerte inversión realizada en digitalización en los últimos años (alrededor de 200 millones de euros) ha permitido a Mutua mejorar todas sus capacidades digitales, así como ofrecer nuevos servicios en todos sus canales digitales, que incorporan las últimas tendencias del mercado, como el uso del big data o de la inteligencia artificial. “Nuestra obligación es, en definitiva, prepararnos para lo que está por venir, estar cada vez más diversificados, con mayor número de productos y servicios alrededor de nuestro negocio tradicional y lograr una mayor vinculación con los clientes. Queremos ayudarles en más ámbitos de su vida y que afiancen y amplíen su relación con Mutua Madrileña”, ha recordado.
Transformación financiera
Buen conocedor del sistema financiero (Garralda fundó en los años 80 la empresa AB Asesores Bursátiles), el presidente de Mutua ha compartido su análisis sobre la situación actual de este ámbito. “El sistema financiero ha experimentado una importante transformación en las últimas décadas. Los cambios regulatorios han sido una importante palanca de cambio, que ha permitido dotar de mayor supervisión y protección al sistema, inyectando requisitos de capital más altos tanto en volumen como en calidad, requisitos de liquidez… Sucesos como la caída de Lehman Brothers o el de las preferentes han derivado en normativas más rígidas que han favorecido un entorno de mercado más seguro para los clientes. La competencia en el sistema bancario me atrevería a decir que es ahora muy superior a la de hace 40 años, pese a las fuertes crisis a las que ha tenido que hacer frente el sector y que han supuesto la desaparición o absorción de numerosas entidades”, ha afirmado.
Compromiso social
Como colofón a su intervención, Garralda ha hablado de la importancia de contribuir a la mejora social desde el ámbito empresarial. “La primera función de las empresas es generar riqueza y, para ello, es necesario mantener un compromiso firme, estable y a largo plazo con sus empleados, clientes y proveedores. Las empresas deben ir más allá y tratar de solucionar, en la medida de sus posibilidades, los problemas que aquejan a la sociedad a la que pertenecen. Eso pasa, entre otras cosas, por ayudar a colectivos desfavorecidos por razones económicas, sociales o de salud. Y esto es lo que hacemos a través de la Fundación Mutua Madrileña, que ahora cumple 20 años. Creo que una empresa que no intenta contribuir a solucionar estos problemas no puede decir que pertenece a la sociedad que la rodea”, ha concluido.