Felipe Benjumea empezó su conferencia haciendo referencia a la difícil situación económica actual, a cuáles han sido sus causas y a las medidas que las empresas pueden adoptar para hacerle frente. Para el presidente de Abengoa la actual coyuntura económica puede brindar a las compañías grandes retos pero también grandes oportunidades de negocio, por ejemplo, el mercado de las energías renovables, sector al cual se dedica su empresa. Así, la creación de una industria sólida y técnicamente avanzada de soluciones sostenibles podría ayudar a la economía española a ser pionera mundial en este sector y también a finalizar con la crisis.
Según Benjumea, para afrontar los retos de la crisis la economía española necesita un plan de salida hacia mercados exteriores que cree riqueza y empleo, ya que el desarrollo económico y social sólo es posible proyectándose hacia fuera. No obstante, para ello es totalmente necesario un aumento del valor añadido de los productos o servicios exportados y un cambio de la actitud colectiva enfocado hacia el esfuerzo, la amplitud de miras y la capacidad de riesgo.
El ponente expuso que la lucha contra el cambio climático plantea muchos retos pero es absolutamente necesaria. Es urgente tomar medidas para reducir los gases de efecto invernadero, sin embargo; Benjumea prevé que estas no serán tomadas hasta que sus consecuencias sean realmente serias, igual que ocurrió con la crisis económica. Es difícil modificar el status quo pero la industria de las energías renovables y los biocombustibles puede ser una gran oportunidad, sobre todo en el Estado español, que podría, de esta manera, romper con la dependencia energética de los combustibles fósiles y absorber a los trabajadores de otros sectores en crisis como el de la construcción.
En el coloquio final se abordaron, entre otras cuestiones, la energía nuclear, la rentabilidad y competitividad de las energías renovables, el éxito de Abengoa, y la necesidad de mejorar la formación para aumentar la competitividad.