Imaginemos un mundo en el que las empresas invierten en la salud de sus empleados bas谩ndose en pruebas cient铆ficas. A cambio, obtienen m煤ltiples beneficios de esas inversiones: sus empleados prosperan, sus actividades prosperan y las sociedades en las que operan prosperan. Cuando las empresas abordan la interconexi贸n inherente entre el trabajo y la salud surge una oportunidad positiva.
- Invertir en la salud y el bienestar de los empleados puede aumentar la productividad, reducir el absentismo y mejorar la atracci贸n y retenci贸n de talentos.
- Esto se traduce en miles de millones de d贸lares de beneficios econ贸micos potenciales a escala mundial.
- Aunque los empleadores desempe帽an un papel crucial, es necesario un planteamiento m煤ltiple para ir m谩s all谩 de la asistencia sanitaria b谩sica y crear unas condiciones de salud 贸ptimas.