Vidas cada vez m谩s aceleradas, anquilosadas en peque帽as y ruidosas viviendas, unidas a los nuevos sonidos y distracciones constantes de la tecnolog铆a, nos hacen buscar lugares para guiarnos en la casi ut贸pica idea de desconexi贸n. Pero, una vez all铆, hay quien no sabe c贸mo enfrentarse a la quietud.