Durante los últimos 20 meses, muchas organizaciones han redefinido por completo las estrategias de participación del cliente para satisfacer las necesidades cambiantes de los consumidores frente a una pandemia global y una agitación social generalizada. Los consumidores ahora esperan experiencias a medida y personalizadas al alternar entre los canales digitales y físicos, pero también son más cautelosos acerca de cómo se capturan e implementan sus datos.
Mientras tanto, las organizaciones se esfuerzan por encontrar la combinación adecuada de talento y tecnologías para elevar la creatividad y la analítica, al tiempo que se aseguran de que su talento sea tan representativo e inclusivo como las experiencias que esperan ofrecer al mercado.