La IA en el marketing no es algo completamente nuevo. Todas las herramientas de Business Intelligence y las anal铆ticas automatizadas del consumo digital son, claramente, ejemplos de c贸mo la IA ya ha entrado hace cierto tiempo en ese campo.
Ahora se abre un nuevo escenario con la masificaci贸n para el gran p煤blico de los servicios de IA que han aparecido en los 煤ltimos meses. Estamos ante la oportunidad de consolidar la automatizaci贸n y personalizaci贸n de las estrategias de marketing. Los enfoques a ventas, comportamiento del cliente o interrelaci贸n con otros servicios vinculados al producto son caracter铆sticas que puede consolidar la IA.
Es importante considerar que, sobre todo, la IA tiene actualmente una relaci贸n muy directa con el marketing digital. Todo lo que sea llegar al consumidor mediante herramientas digitales tiene en la IA una perfecta aliada. En un futuro casi presente hablaremos seguro del cruce de la IA con el marketing en entornos f铆sicos, sobre todo con las oportunidades de la realidad virtual. De momento, nos centramos aqu铆 en el marketing digital al ser de aplicaci贸n inmediata.
As铆 pues, el punto de partida de las acciones de marketing digital con la IA es la capacidad de gestionar datos de forma automatizada y ultrar谩pida. Es enorme la capacidad para analizar y cruzar informaci贸n para definir las estrategias digitales de marketing.
Desde ese punto de partida se puede mejorar la experiencia del cliente. De esa experiencia se pueden obtener datos que permitan mejorar no solamente los productos y servicios, sino tambi茅n los mismos procesos de producci贸n y entrega.
La creaci贸n de contenido personalizado es un ejemplo de ello: con esa personalizaci贸n, el cliente se abre a aportar m谩s informaci贸n de valor. Todas las informaciones de valor de todos los clientes puede ser gestionada por la IA para crear patronos que sirvan de referencia para las novedades a ejecutar. A nivel ‘pasivo’, la IA puede apuntalar a煤n m谩s el ajuste de la publicidad dirigida a un target concreto en un momento concreto.
El mundo que se abre es enorme. Pero hay limitaciones t茅cnicas y 茅ticas que deben considerarse. T茅cnicamente, lo primero es el valor de los datos. La ingente cantidad de datos que circulan por la red hacen necesaria la intervenci贸n humana, de momento, para filtrarlos. De ese filtro depender谩 la capacidad positiva de la IA para ajustar correctamente el modelo de marketing.
Las numerosas herramientas disponibles son otra limitaci贸n t茅cnica. Algunas son similares, otras son totalmente distintas. Los responsables de utilizarlas deben saber, antes de adquirirlas o usarlas, qu茅 funcionalidades tienen y optimizar su aplicaci贸n.
La falta de creatividad humana es otra limitaci贸n. La IA es creativa, pero no es humana. La interacci贸n humana de distintas personas en el momento en el que se dise帽a una campa帽a es algo que, de momento, la IA no ofrece. Esos puntos de vista y conocimientos diversificados son necesarios.
La intervenci贸n humana tambi茅n es necesaria en las predicciones que pueden automatizarse con la IA. Las predicciones generadas por una m谩quina son matizadas y contrastadas por las personas para incorporar factores que la IA, a煤n, no puede detectar.
A todo ello, el marketing digital que utiliza la IA debe integrar las regulaciones de privacidad vigentes. En el caso de la UE el marco est谩 muy claro. Los datos personales y qu茅 hacer con ellos que puede generar la IA debe estar protegido por los generadores de herramientas y estrategias de marketing. Adem谩s, la transparencia en el momento de recibir o consumir acciones de marketing con IA debe ser suficientemente clara para dar opciones a los usuarios a utilizarlo o rechazarlo.
El marketing con IA debe ser positivo y equilibrado. Ahora es solamente el inicio. El campo que se abre es descomunal. Se debe saber aprovechar en beneficio de todos.