Transformación digital: ¿dónde estamos?

jueves 7 de abril del 2022
En las últimas semanas, desde CEDE hemos activado distintas actividades vinculadas con la digitalización en las empresas y el papel que asumen los directivos en este contexto. Es un buen momento para pararse y reflexionar sobre donde estamos en este momento en los procesos de transformación digital.


Ya está establecido que la digitalización se ha instaurado en las empresas, en todos los procesos y en todos los sectores. Hay distintos ritmos de implicación en instaurarse. Las pymes tienen aún recorrido. Las startups nacen digitalizadas. Las corporaciones ya hace tiempo que han activado el proceso, por lo que están en una buena posición.

Como punto de partida tenemos las expresiones de las últimas semanas en las actividades desde CEDE con líderes sobre esta temática. En el Desayuno de trabajo CEDE con el presidente ejecutivo de Telefónica, José María Álvarez-Pallete él mismo nos decía que  “las reglas no fueron pensadas para un mundo digital, fueron pensadas para un mundo físico, y ahora hay que equilibrar el terreno de juego”.  Por lo tanto, un primer punto de contexto es que hay elementos que se deben adaptar mucho porque el mundo digital empieza a superar al mundo físico.

Por otro lado, en la última entrevista de nuestro Liderando en Positivo, la miembro del Consejo de Administración de CaixaBank, Amparo Moraleda, remarca que «la tecnología tiene que estar en el centro de la innovación, pero hay un problema fundamental de competencias y capacidades para poder sacarle partido». Moraleda cree que los fondos Next Generation deben aprovecharse para potenciar ese proceso de digitalización y remarca que especialmente las pymes no pueden dejar pasar esta oportunidad.

El segundo punto importante de contexto es, pues, que cabe potenciar aún el talento capacitado para aprovechar de forma óptima lo que ofrece la transformación digital. Aquí, las políticas de formación, capacitación y atracción de talento serán determinantes.

Y esa capacitación, con nuevas reglas para un mundo digital, debe integrarse en las tres principales áreas en las que se integra la transformación digital. La más extendida es la de la transformación de los procesos para reducir costes y tiempos, y mejorar la calidad. Todo el tema de datos, inteligencia artificial, IoT, y otras tecnologías apuntan hacia ese campo.

La segunda área de transformación es el mismo modelo de negocio. Con la digitalización aparecen nuevas oportunidades para modificar la oferta y adaptarla a las nuevas formas de consumo, también digitalizado. Aquí, el confinamiento generado por la pandemia del COVID-19 ha acelerado los cambios en muchos modelos de negocio de, sobretodo, las pymes.

La tercera área de transformación es la de la propia cultura empresarial. Es lo que comentábamos de la formación y el talento, a lo que podemos añadir las políticas internas de activación de la mentalidad interna en la propia organización.

A partir de aquí, es interesante ver cómo ejecutar esa transformación ahora, según un informe detallado de Deloitte. Allí, la consultora habla de cinco elementos clave para activar esa transformación: tener clara la perspectiva de ‘primero virtual’, incidir en la nube para activar la agilidad necesaria, automatizar las tomas de decisiones donde sea posible, innovar y ser aceleradores del cambio.

El momento de la transformación ahora es el de, definitivamente, tomar la iniciativa sin esperar más. Hay oportunidades y apoyo público suficiente para activarlo.