Hace poco más de un año, España encabezaba el crecimiento en gasto en reuniones y eventos, junto con Francia y Alemania. Barcelona y Madrid entraban en el ‘top 10’ de las ciudades europeas más demandadas. Las empresas españolas apostaban cada día más por este formato, que les proporcionaba visibilidad y engagement, generando una vinculo único entre su marca y el público. Con la pandemia, los eventos tal y como los conocíamos han desaparecido, y el sector se está viendo en un proceso de renovación total.
¿Los eventos digitales o híbridos son el presente y el futuro del sector?
¿Cómo conseguirá reactivarse el sector?
¿Volverán los eventos presenciales?